6.10.07

Estigmatiza a Cervantes infortunio

Más controvertida ha resultado la tesis acerca de la supuesta homosexualidad del escritor


Ciudad de México (6 de octubre de 2007).- Estudiado por la crítica desde el siglo 18, Miguel de Cervantes de Saavedra (1547-1616) aún reserva algunos enigmas acerca de su biografía, como su lugar de nacimiento o una supuesta homosexualidad.La tradición ha sostenido que el autor de El ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha nació en Alcalá de Henares entre el 29 de septiembre y el 9 de octubre, día en que fue bautizado en la parroquia de Santa María la Mayor, pero críticos como César Brandáriz, en Cervantes decodificado, han sugerido que nació en las montañas de León, cerca de Galicia, donde era común el apellido Saavedra, y no en 1547 sino en 1549."Estos nuevos críticos argumentan que no es fehaciente la fe de bautismo, que tiene varias enmendaduras y tachones, no sabemos si sea la original o haya sido adulterada (...)."Daba más distinción decir que se había nacido en una ciudad universitaria de abolengo que en una comunidad perdida en las montañas de León, habría que cotejar con mucho cuidado esa fe de bautismo y someterla a pruebas, pero Brandáriz puede tener razón", explica la hispanista Margarita Peña, catedrática de la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM.Más controvertida ha resultado la tesis acerca de la supuesta homosexualidad del escritor, sugerida en años recientes por cervantistas como Daniel Eisenberg, Ruth El Saffar y Rosa Rossi.Como indicios se citan la amistad de Cervantes con un homosexual —cuyo nombre se desconoce— durante su cautiverio en Argel (1575-1580), y ceder a la sodomía por parte de sus captores para sobrevivir; el matrimonio sin hijos con Catalina de Salazar; la creación de parejas de amigos en sus ficciones; y la posibilidad de que haya sido escritor a sueldo de Cristóbal de Chávez en su Relación de la cárcel de Sevilla, que contiene referencias al amor sexual femenino.Pero objeta que la tesis de la homosexualidad, a 460 años de distancia de su nacimiento del autor, resulta difícil de probar.En Rehén de la fortuna (Centro de Estudios Cervantinos), Peña recoge las controversias en torno al "Manco de Lepanto" que han ocupado a la crítica moderna, interesada en "develar a un Cervantes de cuerpo entero para bajarlo de la categoría de las alegorías literarias".Pinta al autor de las Novelas ejemplares como un hombre a quien la fortuna "solía volvérsele adversa", llegando a estar preso en cuatro ocasiones.Su encarcelamiento más largo, que duró cinco años en Argel, es denominado por Peña como el "cautiverio honroso"."Es resultado de su participación en la victoria de Lepanto, en 1571, que fue su entrada al heroísmo (...). Pasa cinco años como soldado marino para la corona española cuando es capturado por los turcos, el 26 de septiembre de 1575, cuando ya viaja de regreso a España, diría que es un rehén de la fortuna, un juguete del destino", explica la coordinadora de la cátedra Juan Ruiz de Alarcón.Plantea que eI Quijote pudo haberse incubado durante su encarcelamiento en Sevilla, entre 1597-98, por un equívoco relacionado con dinero, y constituye el "cautiverio infamante"."Debió ser un cautiverio muy amargo pues Cervantes ya tenía 50 años, una cosa es un cautiverio épico como el de Argel, y otra ser sospechoso de no rendir cuentas al erario español", asienta la autora de Prodigios novohispanos.Apoyada en los documentos sobre Cervantes, la crítica y una lectura entre líneas de su obra, Peña plantea que en su literatura queda impresa la huella de su biografía: hay ecos de sus cautiverios en su teatro, las Novelas ejemplares y El Quijote."Estamos ante un caso de proyección, desdoblamiento y catarsis. Ahora que la crítica lo está desacralizando, Cervantes debe sentirse muy contento", dice.

Érika P. Buzio
________________________